domingo, 30 de octubre de 2011

El verbo incierto

Sería tan fácil
conjugar un verbo
tan perfecto...

Coordinar tu persona
con mi objeto directo.

Y combinarlo con
cada paso que damos
hacia un mañana
repleto de tiempos
imperfectos
y pluscuamperfectos.

Arrullarme en un verbo
así.

Entre tus ondas sonoras
y tus conexiones cerebrales
para deshilarlas y traducirlas
a mi idioma:

Palabras.

Enrededas con artes
casi griegas
(o latinas, que qué más da
que da lo mismo)

Y decir todo y nada,
(como en este poema)
con unas miradas ciegas
en realidades.

La vida es un poema
y tú las palabras que recita.

1 comentario: